Sexología, ¿Y eso qué es?
La sexología no es, ni más ni menos, que una ciencia cuyo campo de estudio es el sexo. Claro que, cuando hablamos de sexo, podemos estar pensando únicamente en mantener relaciones sexuales y, en realidad, va mucho más allá.
Esta ciencia no estudia única y exclusivamente temas relacionados con mantener relaciones sexuales. Estudia el género y la identidad, las conductas, las interacciones, la orientación… Además, dentro de cada una de estas categorías, a su vez, podemos encontrar otras: salud, educación, asesoramiento, terapia…
Como estás pudiendo comprobar, la sexología es una ciencia bastante amplia. Un sexólogo es el profesional que se encarga de coger estos conocimientos y aplicarlo de la forma que convenga. Los sexólogos son psicólogos que se especializan en este ámbito.
Y ahora estarás preguntándote: ¿Qué tipo de situaciones atiende? ¿Cuándo debo ir a un sexólogo en vez de, por ejemplo, a un ginecólogo o andrólogo? ¡Vamos a verlo!
Situaciones relacionadas con la sexología: ¿Qué atiende un sexólogo?
Como hemos visto en el apartado anterior, la sexología no solo habla de relación sexual, sino también de identidad, reproducción, orientación, conductas, interacciones…
Un sexólogo podría ser el profesional más adecuado para programar, por ejemplo, talleres y charlas educativas sobre sexualidad. Hablamos de salud sexual, de asertividad, de límites, de vinculación, de diversidad, chemsex…
En el contexto de la consulta, las situaciones más frecuentes por las que las personas acuden a profesionales de la sexología son debido a lo relacionado con problemas en relaciones sexuales. Hablamos de:
- Eyaculación precoz.
- Oscilaciones en el deseo.
- Ansiedad relacionada con el sexo.
- Disfunción eréctil.
¿Sexólogo, ginecólogo o andrólogo?
Debes saber que estas dificultades con respecto a las relaciones sexuales pueden tener un origen orgánico (médico) o un origen psicológico. Y es posible que, por eso, tengas la duda que se presenta en el título de este apartado.
No obstante, hay un gran porcentaje de este tipo de problemáticas que tienen que ver con un origen psicológico. Es decir, este tipo de origen es muchísimo más frecuente que el orgánico. Algunas de las causas orgánicas que pueden existir son:
- Uso de determinados fármacos.
- Problemas de diabetes.
- Oscilaciones hormonales.
- Hipertensión.
- Problemas endocrinológicos.
En casos de necesitar ayuda profesional para situaciones que tienen que ver con las relaciones sexuales, lo aconsejable es acudir a un profesional de la sexología, pues podrá diferenciar si se trata de una situación orgánica o psicológica.
Si necesitas terapia sexual, no dudes en contactar con nosotros.